El dibujo de telas se puede subdividir en varias categorías: ropa, capas y banderas. Aunque para empezar lo más fácil son los pañuelos, pues no entraríamos a considerar el empuje del aire sino tan solo los dobleces y los puntos de arrastre.

Independientemente de su complejidad, a la hora de dibujar telas es recomendable usar algún tipo de sombreado que nos ayude a matizar los volúmenes de las arrugas, a veces muy sutiles.

Con capas es importante tener en cuenta el movimiento del personaje, para que el movimiento de la capa (o el empuje del aire) sea coherente con él.

La ropa entraña problemas particulares para el artista. Es una especie de compendio de muchas lecciones anteriores. Hay que tener conocimientos previos de anatomía, perspectiva, sombras y telas.

Por el lado bueno tenemos que es muy fácil encontrar imágenes de referencia. Cualquier catálogo de moda nos proporcionará infinitos ejemplos de chaquetas, pantalones, faldas, blusas y todo aquello que necesitemos.

Así que el primer paso es fijarse bien en las fotos para entender como funcionan las arrugas y los pliegues, cómo se adaptan a la postura, cómo cambian con el movimiento.

Venga, ¡todos a buscar imágenes y a practicar! ¡No hay excusas!