La edad de plata: La salvación de los superheroes por Pedro Angosto
La edad de plata: La salvación de los superheroes por Pedro Angosto
Como comentábamos en el último artículo, la explosión de los superhéroes en los años ’40 se desvaneció rápidamente a principios de los ’50 y sólo un puñado de ellos resistieron en DC.
De hecho, Timely (por aquel entonces Atlas) intentó un breve relanzamiento de Captain America. Human Torch y Sub-Mariner enfrentados a la “Amenaza Roja” en boga durante la Guerra Fría, pero apenas duraron un par de números.
No había llegado el momento (ni Jack Kirby).
Por pura casualidad, DC decidió dar una nueva oportunidad a algunos de sus ya cancelados superhéroes en un título creado para presentar un nuevo concepto cada pocos números: SHOWCASE.
Julius Schwartz, proveniente de la Ciencia-Ficción, optó por revisar los conceptos de la Golden Age pero con parámetros más científicos, más en onda con la tecnología de la carrera espacial, los teóricos nucleares o las teorías sobre extraterrestres.
Unido a una nueva generación de guionistas y dibujantes, re-imaginó a algunos personajes DC de los que apenas quedó su nombre original y alguna semejanza con sus poderes.
El primero, en 1955 fue Flash.
Originalmente Jay Garrick había ganado supervelocidad al respirar “vapores de agua pesada” en la universidad.
Pero el nuevo Flash era Barry Allen, un policía científico que era golpeado por un rayo y duchado por una estantería de productos químicos electrificados.
El resultado es el mismo, ganaba supervelocidad, pero esta vez no portaba un casco metálico alado como el del dios Mercurio, sino que su uniforme, diseñado por Carmine Infantino, era una ajustada malla roja.
Un concepto similar a lo que llevan hoy en día los corredores, pero que entonces era obviamente futurista.
El invento funcionó y Barry pronto volvió con más aventuras.
Pero lo importante es que se aplicó el método a un puñado de personajes fracasados más:
Green Lantern, de obtener sus poderes de una linterna mágica creada por un hechicero oriental, pasó a ser Hal Jordan, piloto de pruebas reclutado por Los Guardianes del Universo para formar un grupo policial interestelar.
Los Green Lantern Corps, que patrullaban 3600 sectores del universo impartiendo justicia.
Hawkman, pasó de ser la reencarnación de un príncipe egipcio a otro policía extraterrestre, procedente del planeta Thanagar y destinado a la Tierra para aprender de los métodos de lucha contra el crimen.
Atom, en su origen un personaje bajito con el único poder de ser un as deportivo, se convirtió en un superhéroe capaz de cambiar su tamaño hasta niveles micro-atómicos. etc. etc. etc….
Justice League of America
Schwarzt, seguro tras unos años del éxito de su empresa, recuperó el concepto de supergrupo y unió a estos personajes, junto a otros de los originales, en la Justice League of America.
Gardner Fox fue su principal guionista, uno que en realidad llevaba trabajando en DC desde sus orígenes.
Con Schwartz el mundo mágico, místico, oscuro de los años ’40 se transformó en un verdadero Universo Interestelar.
En él, los alienígenas y los planetas de exóticos se amontonaban mes tras mes y aventura tras aventura.
Otra de las principales características de estas nuevas versiones es la presencia de fuertes personajes femeninos:
Carol Ferris, eterno ligue de Hal Jordan, Iris West, periodista casada con Flash, o la propia Hawkwoman, esposa de Katar Hal, no encajaban ya en el molde de Lois Lane, eterna “doncella en apuros”.
Los conceptos y las versiones introducidas desde 1955 a 1961 definirían a los personajes, con mayores o menores retoques, hasta la actualidad.